sábado, 27 de marzo de 2010

Los sacramentales

Hace unos días, recibí el siguiente comentario:
Hola p. Luis, Me gustaria que escribiera sobre los sacramentales (sal, aceite agua). es lo mismo que esten bendecidos que exorcisados? quiene pueden exorcisarlos, cualquier sacerdote? desde ya muchas gracias por sus enseñanzas.
Que Dios lo Bendiga. LAURA ALEJANDRA A.

Aprovecho para saludar a Laura y tratar de contestar su pregunta.

Veamos en el Catecismo de la Iglesia Católica:

1667 "La Santa Madre Iglesia instituyó, además, los sacramentales. Estos son signos sagrados con los que, imitando de alguna manera a los sacramentos, se expresan efectos, sobre todo espirituales, obtenidos por la intercesión de la Iglesia. Por ellos, los hombres se disponen a recibir el efecto principal de los sacramentos y se santifican las diversas circunstancias de la vida" (SC 60; CIC can 1166; CCEO can 867).

Características de los sacramentales

1668 Han sido instituidos por la Iglesia en orden a la santificación de ciertos ministerios eclesiales, de ciertos estados de vida, de circunstancias muy variadas de la vida cristiana, así como del uso de cosas útiles al hombre. Según las decisiones pastorales de los obispos, pueden también responder a las necesidades, a la cultura, y a la historia propias del pueblo cristiano de una región o de una época. Comprenden siempre una oración, con frecuencia acompañada de un signo determinado, como la imposición de la mano, la señal de la cruz, la aspersión con agua bendita (que recuerda el Bautismo).

1669 Los sacramentales proceden del sacerdocio bautismal: todo bautizado es llamado a ser una "bendición" (cf Gn 12,2) y a bendecir (cf Lc 6,28; Rm 12,14; 1 P 3,9). Por eso los laicos pueden presidir ciertas bendiciones (cf SC 79; CIC can 1168); la presidencia de una bendición se reserva al ministerio ordenado (obispos, presbíteros o diáconos, [cf. Bendicional, Prenotandos generales, 16 y 18]), en la medida en que dicha bendición afecte más a la vida eclesial y sacramental.

1670 Los sacramentales no confieren la gracia del Espíritu Santo a la manera de los sacramentos, pero por la oración de la Iglesia preparan a recibirla y disponen a cooperar con a ella. "La liturgia de los sacramentos y de los sacramentales hace que, en los fieles bien dispuestos, casi todos los acontecimientos de la vida [...] sean santificados por la gracia divina que emana del misterio Pascual de la pasión, muerte y resurrección de Cristo, de quien reciben su poder todos los sacramentos y sacramentales, y que todo uso honesto de las cosas materiales pueda estar ordenado a la santificación del hombre y a la alabanza de Dios" (SC 61).


Diversas formas de sacramentales

1671 Entre los sacramentales figuran en primer lugar las bendiciones (de personas, de la mesa, de objetos, de lugares). Toda bendición es alabanza de Dios y oración para obtener sus dones. En Cristo, los cristianos son bendecidos por Dios Padre "con toda clase de bendiciones espirituales" (Ef 1,3). Por eso la Iglesia da la bendición invocando el nombre de Jesús y haciendo habitualmente la señal santa de la cruz de Cristo.

Entonces, debemos tener en cuenta dos cosas:
1) Los sacramentos confieren la Gracia (perdonan los pecados, nos incorporan a la Iglesia dándonos la Gracia santificante, etc.); los sacramentales, nos invitan a acercarnos y vivir los sacramentos, pero no reemplazan a los sacramentos. No debemos separarlos nunca en nuestra vida de fe, sino más bien hacer de ellos una práctica cotidiana en la vida de todos los días.

2) Cuando se celebra un sacramental, participa toda la oración de la Iglesia
, no sólo las personas presentes, por eso tiene una fuerza espiritual muy distinta de una oración privada. La intercesión de todos los santos, los ángeles, y de toda la Iglesia orante en el cielo y en la tierra son aplicados en esa celebración, así sea una bendición muy sencilla.


Sigue diciendo el Catecismo:

1673
Cuando la Iglesia pide públicamente y con autoridad, en nombre de Jesucristo, que una persona o un objeto sea protegido contra las asechanzas del Maligno y sustraída a su dominio, se habla de exorcismo. Jesús lo practicó (cf Mc 1,25-26; etc.), de Él tiene la Iglesia el poder y el oficio de exorcizar (cf Mc 3,15; 6,7.13; 16,17). En forma simple, el exorcismo tiene lugar en la celebración del Bautismo. El exorcismo solemne llamado «el gran exorcismo» sólo puede ser practicado por un sacerdote y con el permiso del obispo. En estos casos es preciso proceder con prudencia, observando estrictamente las reglas establecidas por la Iglesia. El exorcismo intenta expulsar a los demonios o liberar del dominio demoníaco gracias a la autoridad espiritual que Jesús ha confiado a su Iglesia. Muy distinto es el caso de las enfermedades, sobre todo psíquicas, cuyo cuidado pertenece a la ciencia médica. Por tanto, es importante, asegurarse , antes de celebrar el exorcismo, de que se trata de un presencia del Maligno y no de una enfermedad (cf. CIC can. 1172).

El rito del exorcismo también es un sacramental. En este sentido, la recepción de un sacramento, por ejemplo la confesión o la participación en misa y la recepción de la Eucaristía, al conferir la Gracia de Dios, a nivel espiritual es infinitamente superior a la recepción de un exorcismo por parte de un poseso (que de hecho puede estar en gracia de Dios y a la vez sufrir una verdadera posesión). Sin embargo, a nivel sensible, es evidente el sufrimiento y las graves dificultades que tendrá en la vida dicha persona afectada, que necesitará una oración específica.


El Exorcismo es un rito litúrgico que está en el ámbito de los sacramentales, esto es, una oración pública en la que interviene toda la fuerza de la Iglesia en comunión orante que suplica a Cristo y le ordena al maligno para que éste se aleje y cese su acción nefasta. El ministro ordinario del rito del exorcismo es el Obispo o algún sacerdote a quien él delegue dicha celebración.

El Obispo es el responsable delante de Dios y la Iglesia, al serle encomendada la tarea de realizar él mismo el exorcismo, delegarlo o prohibirlo, nombrar un exorcista en su Diócesis o no. Toda Diócesis debería tener al menos un exorcista preparado y además un equipo adecuado a tal efecto. Pero la realidad lamentablemente indica otra cosa...

En el marco de la lucha contra el maligno, dentro del rito del exorcismo o también como un sacramental específico fuera del rito del exorcismo a las personas, encontramos el exorcismo y la Bendición de la sal, del agua y del aceite.

Cada bendición contiene su oración específica y en ella se expresa lo que se desea. Por ej. si queremos bendecir un niño o un anciano, la mesa para comer, un auto, un negocio, etc. la oración que se realiza será distinta en cada caso según lo que se desea.
Por este motivo existen en este sentido las oraciones IMPERATIVAS: en las que se le da una orden (no se le pide, se le ordena) al Maligno para que abandone a la persona, cosa o lugar; y las oraciones DEPRECATIVAS: en las que se le suplica a Dios, por intercesión de María, los santos, etc, que derrame su bendición, que atienda a nuestras necesidades, que en este caso concreto libre a la persona de las ataduras del Maligno.

La mayoría de las bendiciones son realizadas con el signo del agua bendita. Cuando la intención de usar estos sacramentales del agua, aceite y sal es la de interceder para que el Señor nos libre del enemigo, entonces se usan los dos tipos de oraciones: las imperativas y las deprecativas, aplicadas al agua, la sal y el aceite, obviamente, pero cuyo fin primordial es la liberación de las personas o de las cosas o lugares afectados que ejercen influencias diabólicas en las personas.
Claro que el agua bendita también es eficaz en todo tipo de oración, siempre que la fe acompañe, como así también las verdaderas disposiciones de los fieles.

Para exorcizar y bendecir el agua, aceite y sal, se necesita un ministro ordenado, y además deben observarse los ritos y fórmulas aprobadas, así al menos lo manifiesta el antiguo ritual y el actual derecho canónico.
También tenemos la bendición que encontramos en el Misal Romano con el que todos los sacerdotes celebran las misas en todas nuestras parroquias. Quizá alguno hasta no lo sepa, pero, Laura, cuando quieras pedirle a un sacerdote agua y sal exorcizada y bendita, y él te conteste que no sabe cómo hacer y no tiene ninguna oración para hacerla, decile que se fije en el Misal con el que celebra la Santa Misa, que busque hacia el final del mismo, en donde está la bendición de la sal y el agua, para el rito penitencial. De paso le estarás enseñando algo. Cualquier sacerdote puede realizar este rito de bendecir el agua y la sal, que incluso se indica en algunos momentos, como por ej. este Domingo de Ramos, dentro de la Misa misma, en el rito penitencial.

No es necesario que un sacerdote sea exorcista para exorcizar y bendecir agua, aceite y sal, pero sí es necesario que sea ministro ordenado.
El sentido de estar exorcizados cada elemento antes de ser bendecidos le agrega el efecto de su eficacia en la lucha contra el maligno, y cada elemento tiene un fin específico.
El
Agua bendita nos recuerda el bautismo y se usa, como dije, en casi todos los ritos de bendición. Dice don Gabriel Amorth, ex exorcista del Vaticano que la oración de exorcismo sobre el agua agrega en ella muchos efectos, el principal es hacer perder al Demonio todo poder y hacerlo huir, como así también luchar contra las enfermedades y otras influencias que éste ejerce en las personas directamente o indirectamente a través de cosas o lugares afectados.
El
aceite se utiliza en el área de la salud física y mental, alma y cuerpo para librarlo de las adversidades. Recuerda el uso antiguo de ungir con el aceite las heridas y el poder que Jesús dio a los Apóstoles de curar a los enfermos con la imposición de las manos y ungiéndolos con el aceite. Nos prepara para el sacramento de la Confesión y la Unción de los enfermos.
La
sal exorcizada protege los lugares de presencias malignas.

Aunque algunos puedan burlarse, o cause risa a los incrédulos o teóricos, estos elementos, si son "potables", tranquilamente pueden consumirse. Y no sólo pueden, sino que verdaderamente son un arma eficaz en la lucha contra el Enemigo, aun para aquellos que no creen. Si lo usamos con verdadera fe, podemos cocinar con estos elementos bendecidos, si sospechamos que algo nos afecta, ya que siempre el maligno ataca a la cabeza y al estómago, a los afectos (generando tristeza, angustia, depresión...), a la relación con los demás (aislamiento, ira, peleas, aun cuando todos se quieran), porque el fin último que desea es la muerte (intenta llevar al suicidio) de las personas.
Con esto no estoy diciendo que toda tristeza o angustia, ira o depresión, etc. provenga del Maligno, de ninguna manera. El signo de que hay una influencia de este tipo es la mejoría que la persona va a ir sintiendo si comienza a orar y pedir con fe al Señor que lo libere, usando los sacramentales, perdonando, renunciando al curanderismo, volviendo a la Iglesia, a los sacramentos, a la Palabra de Dios, etc.
Espero haber contestado tu pregunta. Feliz Semana Santa.
P. Luis

A continuación, las oraciones para bendecir sal, agua, y aceite. Podremos comparar las últimas fórmulas con las del anterior ritual. Veremos que en el ritual antiguo están las oraciones Imperativas (exorcismos) y luego las Deprecativas (Bendiciones), no así en el nuevo, en el que sólo se conservaron las Deprecativas.


Rito para bendecir el agua y la sal en el actual Ritual de los exorcismos

Bendición del agua

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.
R. Amén


Dios, Padre omnipotente,
que quiere que todos los hombres se salven, esté con ustedes.

R. Y con tu espíritu.


Dios, que para la salvación del género humano,

hiciste brotar de las aguas

el sacramento de la nueva vida,
e
scucha, con bondad, nuestra oración

e infunde el poder de tu bendición +
sobre esta agua,

para que sirviendo a tus misterios,
como criatura tuya,

asuma el efecto de la divina gracia

que espante los demonios y expulse las dolencias

y así, al ser rociados,

tus fieles sean liberados de todo daño;

que en el sitio que será aspergido con esta agua,

no resida el espíritu del mal

y se alejen todas las insidias del oculto enemigo;

haz que tus fieles,

manteniéndose firmes
por la invocación de tu santo Nombre,

sean libres de todas las asechanzas.

Por Jesucristo, nuestro Señor.

R. Amén


O bien
, esta otra oración:

Dios todopoderoso,

fuente y origen de la vida del alma y del cuerpo,

bendice + esta agua,
que vamos a usar con fe

para implorar el perdón de nuestros pecados

y alcanzar la ayuda de tu gracia

contra toda enfermedad y asechanza del enemigo.

Concédenos, Señor, por tu misericordia,

que las aguas vivas siempre broten salvadoras,

para que podamos acercarnos a ti
con el corazón limpio

y evitemos todo peligro de alma y cuerpo.

Por Jesucristo, nuestro Señor.

R. Amén



Bendición de la sal


Te suplicamos, Dios todopoderoso,

que bendigas + en tu bondad esta sal, creada por ti.
Tú mandaste al profeta Eliseo

arrojarla en el agua estéril para hacerla fecunda.

Concédenos, Señor,
que al recibir la aspersión
de esta agua mezclada con sal

nos veamos libres de los ataques del enemigo,

y la presencia del Espíritu Santo nos proteja siempre.

Por Jesucristo, nuestro Señor.

R. Amén.


(Mezcla el sacerdote la sal con el agua, sin decir nada, para luego asperger con el agua bendita a los presentes y al lugar, diciendo...)


Esta es el agua que Dios ha bendecido.

Que ella sea para nosotros
fuente de salvación y de vida.

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

R. Amén


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Ritual de la Bendición del agua, sal y aceite (Ritual Romano antiguo, Tít IX, C. II)


El sacerdote, con estola morada, pronuncia la siguiente invocación:


V/. Nuestro auxilio es el Nombre del Señor.

R/. Que hizo el cielo y la tierra.


Exorcismo y Bendición de la sal

Te exorcizo, creatura de la sal, por Dios + vivo, por Dios + verdadero, por Dios + santo, por Dios que ordenó, por medio del profeta Eliseo, que fueses puesta en el agua para sanar su esterilidad; para que te conviertas como sal exorcizada en salud para los creyentes, para que seas salud de alma y cuerpo para todos aquellos que te consuman; para que huya y se aparte del lugar donde seas puesta, toda maldad, toda acción del demonio, todo espíritu inmundo, conjurado por este Señor que ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos y el siglo por medio del fuego. Amén.


Oremos

Imploramos humildemente tu inmensa clemencia, omnipotente y eterno Dios, para que te dignes con tu piedad bendecir + y santificar + esta creatura de la sal que Tú creaste para uso del género humano: a fin de que se convierta en salud de alma y cuerpo para todos los que la consuman; y para que todo aquello que sea tocado por esta sal carezca de toda inmundicia y de toda impregnación del espíritu del mal. Por Nuestro Señor Jesucristo. Amén


Exorcismo y Bendición del agua

Te exorcizo, creatura del agua, en el nombre de Dios + Padre omnipotente, en el nombre de Jesucristo + su Hijo, nuestro Señor, y con el poder del Espíritu + Santo: para que seas agua exorcizada para ahuyentar toda fuerza del Enemigo y para que puedas erradicar y arrancar al mismo Enemigo con sus ángeles apóstatas, por virtud del mismo Jesucristo nuestro Señor que ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos y este siglo por el fuego. Amén.


Oremos

Oh Dios, sé propicio a nuestras súplicas e infunde la fuerza de tu bendición + a esta agua que hemos preparado con estas purificaciones, para que esta tu creatura sirva para alejar a los demonios, sanar las enfermedades; para que al ser derramada sobre las casas y los hogares de los fieles, éstos queden libres de toda inmundicia y de todo mal; que no resida allí un espíritu pestilente, se alejen todas las insidias del Enemigo y, si hay algo que perjudique a los que habiten en ella o a su tranquilidad, por la aspersión de esta agua huyan, para que la salud que te pedimos por invocación de tu Nombre quede defendida de toda impugnación del Maligno, por Jesucristo nuestro Señor. Amén.


El sacerdote coloca tres veces sal en el agua a manera de cruz diciendo:


Que esta mezcla de la sal y del agua se realice en el nombre del Padre + y del Hijo + y del Espíritu Santo. Amén.


V/. El Señor esté con vosotros.

R/. Y con tu espíritu.


Oremos

Oh Dios, autor de todo poder y rey insuperable de todo dominio y siempre triunfador magnífico, que reprimes las fuerzas del dominio del mal, que superas la sevicia del Enemigo, que poderosamente vences a las huestes enemigas: a ti, humildes, te pedimos, Señor, que mires con bondad estas creaturas de sal y agua y las santifiques con tu bondad, para que doquiera que sean regadas, por la invocación de tu santo Nombre desaparezca toda infestación del espíritu inmundo, sea alejado el terror de la serpiente infernal, y, mediante la presencia del Espíritu Santo, nos concedas benigno tu misericordia ya que humildemente te la suplicamos.

Por Nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén


Exorcismo y Bendición del aceite

V/. Nuestro auxilio es el nombre del Señor

R/. Que hizo el cielo y la Tierra

Exorcismo

Te exorcizo, creatura de aceite, por Dios Padre omnipotente, que hizo el cielo y la Tierra, el mar y todo lo que allí existe. Que se aleje de este aceite toda fuerza del Adversario, toda acción diabólica y toda incursión de Satanás, a fin de que dé a los que lo usen salud mental y corporal, en el nombre de Dios + Padre omnipotente, de Jesucristo + su Hijo y Señor nuestro y del Espíritu + Santo Paráclito y en el amor del mismo Señor Jesucristo que ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. Amén.

V/. ¡Señor! Escucha nuestra oración

R/. Y llegue a ti nuestro clamor

V/. El Señor esté con vosotros

R/. Y con tu espíritu.

Oremos

Bendición

Señor Dios omnipotente, delante de quien está con temor el ejército de los ángeles, cuyo servicio espiritual conocemos, dígnate mirar, bendecir + y santificar + este aceite con el cual mandaste ungir a los enfermos, a fin de que, una vez obtenida la salud, te diesen gracias a ti, Dios vivo y verdadero. Te rogamos que cuantos usen este aceite que bendecimos + en tu nombre queden libres de toda enfermedad, de todo dolor y todas las insidias del Enemigo, y asimismo se libren de toda adversidad y nunca sean heridos por la mordedura de la antigua serpiente, ya que los has redimido con la Sangre de tu Hijo. Por el mismo Señor nuestro Jesucristo que contigo vive y reina en la unidad del Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amen.

(Se hace la aspersión con agua bendita)

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Cuando sea necesario liberarnos de una maldición intergeneracional, o actual, y pedir la bendición del Señor, se puede recurrir a un sacerdote para que con mucha fe, invocando al Señor, haga la siguiente oración


Oración para anular una maldición (para ser dicha solo por sacerdotes)

Señor Jesucristo, creo que tú eres el Hijo de Dios y el único camino a Dios, que moriste en la Cruz por mis pecados y por mí fuiste resucitado de entre los muertos.

Con fundamento en lo que hiciste por mí, y por mi hermano/a por quien te suplico apoyado en el poder de mi sacerdocio:

Creo que las reivindicaciones de Satanás contra nosotros están canceladas en tu Cruz. Y así, Señor Jesús, yo me someto a ti y me comprometo a servirte y a obedecerte, y basado en esto tomo posición contra cualquier fuerza maligna de las tinieblas que, de alguna forma, haya entrado en la vida de este/a hermano/a nuestro/a, sea por sus propios actos, sea por actos de su familia o de sus antepasados, o de alguna otra cosa que desconozcamos. Donde quiera que haya sombra en la vida, cualesquiera fuerzas malignas, yo las destruyo ahora, Señor.

No permito que NN esté sometido/a a esta maldición por más tiempo y en el Nombre poderoso de Jesús, el Hijo de Dios y la autoridad de mi Sacerdocio Sacramental, destruyo todas las fuerzas del mal que lo/a atormentan, y lo/a libero totalmente de toda maldición.

Invoco al Espíritu Santo de Dios para que invada a mi hermano/a NN y realice su liberación del mal, entera y realmente, como sólo el Espíritu de Dios lo puede hacer.

En nombre de Jesucristo. Amén.


viernes, 26 de marzo de 2010

En memoria de Viktor Frankl

Viktor Emil Frankl, (n. 26 de marzo de 1905, en Viena, Austria - 2 de septiembre de 1997, en Viena) fue un neurólogo y psiquiatra austríaco, fundador de la Logoterapia. Sobrevivió desde 1942 hasta 1945 en varios campos de concentración nazis, incluidos Auschwitz y Dachau. A partir de esa experiencia (y en el mismo campo de concentración, donde en papeles que consiguió hizo sus anotaciones) escribió el libro El hombre en busca de sentido, entre otras obras, en la que viviendo en los campos de concentración aplicó y demostró vivencialmente la capacidad de sentido del ser humano.
Aquí un breve texto del libro:

Al declarar que el hombre es una criatura responsable y que debe aprehender el sentido potencial de su vida, quiero subrayar que el verdadero sentido de la vida debe encontrarse en el mundo y no dentro del ser humano o de su propia psique, como si se tratara de un sistema cerrado. Por idéntica razón, la verdadera meta de la existencia humana no puede hallarse en lo que se denomina autorrealización. Esta no puede ser en sí misma una meta por la simple razón de que cuanto más se esfuerce el hombre por conseguirla más se le escapa, pues sólo en la misma medida en que el hombre se compromete al cumplimiento del sentido de su vida, en esa misma medida se autorrealiza. En otras palabras, la autorrealización no puede alcanzarse cuando se considera 'un fin en sí misma, sino cuando se la toma como efecto secundario de la propia trascendencia.
No debe considerarse el mundo como simple expresión de uno mismo, ni tampoco como mero instrumento, o como medio para conseguir la autorrealización...


Qué importante es aceptar la triple dimensión de la persona: cuerpo (dimensión física), alma (dimensión psicoafectiva, memoria, inteligencia, voluntad), espíritu (dimensión espiritual, memoria espiritual, inteligencia espiritual, voluntad espiritual). El grave error del psicologismo está en haber identificado el "alma" con el "espíritu", o, mejor dicho, negar ésta última dimensión reduciéndolo todo a la segunda.

¿Habrá leído V. Frankl el Evangelio? Cuán simple es Jesús, nos reveló que más allá de la autorrealización, el sentido de la vida está en "ir detrás de él", lo que equivale a "seguirlo" y buscar la voluntad del Padre, autor de todo sentido: Lc 9,23-25 (Ver también Mt 16,24-28; 10, 38-39; Mc 8,34-9,1).

Después Jesús dijo a todos: "El que quiera seguirme, que renuncie a sí mismo, que cargue con su cruz cada día y me siga. Porque el que quiera salvar su vida, la perderá y el que pierda su vida por mí, la salvará. ¿De qué le servirá al hombre ganar el mundo entero si pierde y arruina su vida?


Pero sigamos con otro texto de El hombre en busca de sentido en el que Frankl desarrolla algunos conceptos básicos para que cualquiera pueda tener una técnica personal: la ansiedad anticipatoria, la intención excesiva o hiperintención, la atención excesiva o hiperreflexión, la intención paradójica, la "dereflexión"

La logoterapia como técnica
Para entender lo que sucede cuando se utiliza esta técnica, tomemos como punto de partida una condición que suele darse en los individuos neuróticos, a saber: la ansiedad anticipatoria. Es característico de ese temor el producir precisamente aquello que el paciente teme. Por ejemplo, una persona que teme ponerse colorada cuando entra en una gran sala y se encuentra con mucha gente, se ruborizará sin la menor duda. En este sentido podría extrapolarse el dicho: "el deseo es el padre del pensamiento" y afirmar que "el miedo es la madre del suceso".
Por irónico que parezca, de la misma forma que el miedo hace que suceda lo que uno teme, una intención obligada hace imposible lo que uno desea a la fuerza. Puede observarse esta intención excesiva, o "hiperintención" como yo la denomino, especialmente en los casos de neurosis sexuales. Cuanto más intenta un hombre demostrar su potencia sexual o una mujer su capacidad para sentir el orgasmo, menos posibilidades tienen de conseguirlo. El placer es, y debe continuar siéndolo, un efecto o producto secundario, y se destruye y malogra en la medida en que se le hace un fin en sí mismo.
Además de la intención excesiva, tal como acabamos de describirla, la atención excesiva o "hiperreflexión", como se la denomina en logoterapia, puede ser asimismo patógeno (es decir, producir enfermedad). El siguiente informe clínico ilustrará lo que quiero decir. Una joven acudió a mi consulta quejándose de ser frígida. La historia de su vida descubrió que en su niñez su padre había abusado de ella; sin embargo y, como fácilmente se evidenció, no fue esta experiencia, traumática en sí, la que eventualmente le había originado la neurosis sexual. Sucedía que tras haber leído trabajos de divulgación sobre psicoanálisis, la paciente había vivido todo el tiempo con la temerosa expectativa de la desgracia que su traumática experiencia le acarrearía en su día. Esta ansiedad anticipatoria se resolvía tanto en una excesiva intencionalidad para confirmar su femineidad como en una excesiva atención que se centraba en sí misma y no en su compañero. Todo lo cual era más que suficiente para incapacitarla y privarle de la experiencia del placer sexual, ya que en ella el orgasmo era tanto un objeto de la atención como de la intención, en vez de ser un efecto no intencionado de la devoción no reflexiva hacia el compañero. Tras seguir un breve período de logoterapia, la atención e intención excesivas de la paciente sobre su capacidad para experimentar el orgasmo se hicieron "dereflexivas" (y con ello introducimos otro término de la logoterapia). Cuando recodificó su atención enfocándola hacia el objeto apropiado, es decir, el compañero, el orgasmo se produjo espontáneamente.
Pues bien, la logoterapia basa su técnica denominada de la "intención paradójica" en la dualidad de que, por una parte el miedo hace que se produzca lo que se teme y, por otra, la hiperintención estorba lo que se desea. Por la intención paradójica, se invita al paciente fóbico a que intente hacer precisamente aquello que teme, aunque sea sólo por un momento.
Recordaré un caso. Un joven médico vino a consultarme sobre su temor a transpirar. Siempre que esperaba que se produjera la transpiración, la ansiedad anticipatoria era suficiente para precipitar una sudoración. A fin de cortar este proceso tautológico, aconsejé al paciente que en el caso de que ocurriera la sudoración, decidiera deliberadamente mostrar a la gente cuánto era capaz de sudar. Una semana más tarde me informó de que cada vez que se encontraba a alguien que antes hubiera desencadenado su ansiedad anticipatoria, se decía para sus adentros: "Antes sólo sudaba un litro, pero ahora voy a sudar por lo menos diez." El resultado fue que, tras haber sufrido por su fobia durante años, ahora era capaz, con una sola sesión, de verse permanentemente libre de ella en una semana.
El lector advertirá que este procedimiento consiste en darle la vuelta a la actitud del paciente en la medida en que su temor se ve reemplazado por un deseo paradójico. Mediante este tratamiento, el viento se aleja de las velas de la ansiedad. Ahora bien, este procedimiento debe hacer uso de la capacidad específicamente humana para el desprendimiento de uno mismo, inherente al sentido del humor. Esta capacidad básica para desprenderse de uno mismo se pone de manifiesto siempre que se aplica la técnica logoterapéutica denominada "intención paradójica". Al mismo tiempo se capacita al paciente para apartarse de su propia neurosis. Gordon W. Allport escribe: "El neurótico que aprende a reírse de sí mismo puede estar en el camino de gobernarse a sí mismo, tal vez de curarse." La intención paradójica es la constatación empírica y la aplicación clínica de la afirmación de Allport.
Los informes de unos pocos casos más pueden servir para explicar mejor este método. El paciente que cito a continuación era un contable que había sido tratado por varios doctores en distintas clínicas sin obtener ningún avance terapéutico. Cuando llegó a verme estaba en el límite de la desesperación y reconocía que estaba a punto de suicidarse. Durante varios años venía padeciendo el calambre de los escribientes, que últimamente era tan agudo que corría grave peligro de perder su empleo. De modo que una situación tal sólo podía aliviarse por una terapia breve e inmediata. Para iniciar el tratamiento, mi ayudante recomendó al paciente que hiciera justamente lo contrario de lo que venía haciendo; es decir, en vez de tratar de escribir con la mayor claridad y pulcritud posibles, que escribiera con los peores garabatos. Se le aconsejó que se dijera para sus adentros: "Bueno, ahora voy a mostrar a toda esa gente lo buen chupatintas que soy." Y en el momento en que deliberadamentetrató de garrapatear, le fue imposible hacerlo. "Intenté hacer garabatos, pero no pude, así de sencillo", nos contó al día siguiente. En 48 horas el paciente pudo, de este modo, liberarse de su calambre de escribiente y así continuó durante el período de observación después del tratamiento. Hoy es un hombre feliz y puede trabajar a pleno rendimiento.
Un caso similar referente al habla y no a la escritura me contó mi colega en el Departamento de Laringología del Hospital Policlínico. Era el caso más serio de tartamudeo que él había encontrado en muchos años de práctica de la medicina. Nunca en su vida, hasta donde el tartamudo podía recordar, se había visto libre de esta dificultad para hablar, ni por un momento, excepto una vez. Ello sucedió cuando tenía 12 años y se había subido detrás de un coche de la calle para hacerse llevar. Cuando el conductor le agarró pensó que la única forma de escapar era atraerse su simpatía, por lo cual trató de demostrarle que era un pobre muchacho tartamudo. Desde el momento en que intentó tartamudear fue incapaz de conseguirlo. Sin darse cuenta, había practicado la intención paradójica, si bien no con propósitos terapéuticos.
Sin embargo, esta presentación no debería dar la impresión de que la intención paradójica sólo es eficaz en los casos monosintomáticos. Mediante esta técnica logoterapéutica mis compañeros del Hospital Policlínico de Viena han conseguido curar incluso neurosis de carácter obsesivo-compulsivo en los grados más altos y más pertinaces. Hago referencia, por ejemplo, a una mujer de 65 años que durante 60 años venía padeciendo una obsesión de limpieza tan seria que yo creía que el único procedimiento para curarla era practicarle una lobotomía. No obstante, mi ayudante empezó el tratamiento logoterapéutico con la técnica de la intención paradójica y dos meses más tarde la paciente podía llevar una vida normal. Antes de admitirla en la clínica nos había confesado: "La vida es un infierno para mí". Disminuida por su compulsión y por su obsesión bacteriofóbica, al final había tenido que quedarse en la cama todo el día incapaz de realizar ninguna tarea doméstica. No sería exacto afirmar que hoy está totalmente libre de sus síntomas, ya que siempre puede venirle a la mente alguna obsesión, pero sí es capaz de "reírse de ella", como dice; en una palabra, de aplicar la intención paradójica.
La intención paradójica también puede aplicarse en casos de trastornos del sueño. El temor al insomnio (el temor al insomnio se debe, en la mayoría de los casos al desconocimiento que el paciente tiene de que el organismo se ofrece a sí mismo la mínima cantidad de sueño que de verdad necesita) da por resultado una hiperintención de quedarse dormido que, a su vez, incapacita al paciente para conseguirlo. Para vencer este temor especial, yo suelo aconsejar al paciente que no intente dormir, sino por el contrario que haga lo opuesto, es decir, permanecer despierto cuanto sea posible. En otras palabras, la hiperintención de quedarse dormido, nacida de la ansiedad anticipatoria de no poder conseguirlo, debe reemplazarse por la intención paradójica de no quedarse dormido, que pronto se verá seguida por el sueño.
La intención paradójica no es una panacea, pero sí un instrumento útil en el tratamiento de las situaciones obsesivas, compulsivas y fóbicas, especialmente en los casos en que subyace la ansiedad anticipatoria. Además, es un artilugio terapéutico de efectos a corto plazo, de lo cual no debiera, sin embargo, concluirse que la terapia a corto plazo tenga sólo efectos terapéuticos temporales. Una de las "ilusiones más comunes de la ortodoxia freudiana" escribía el desaparecido Emil A. Gutheil "es que la durabilidad de los resultados se corresponde con la duración de la terapia". Entre mis casos tengo, por ejemplo, el informe de un paciente a quien se administró la intención paradójica hace más de veinte años y su efecto terapéutico ha probado ser permanente.


Nuestro autor nos asegura que cuando el sufrimiento está dado igual es posible darle un sentido. Aquí nos propone una aplicación práctica acerca de dar un sentido al sufrimiento. No es que el sufrimiento tenga sentido por sí mismo, soy yo quien debe darle un sentido al sufrimiento que existe y es inevitable
. Leamos el siguiente texto:

El sentido del sufrimiento

Cuando uno se enfrenta con una situación inevitable, insoslayable, siempre que uno tiene que enfrentarse a un destino que es imposible cambiar, por ejemplo, una enfermedad incurable, un cáncer que no puede operarse, precisamente entonces se le presenta la oportunidad de realizar el valor supremo, de cumplir el sentido más profundo, cual es el del sufrimiento. Porque lo que más importa de todo es la actitud que tomemos hacia el sufrimiento, nuestra actitud al cargar con ese sufrimiento. Citaré un ejemplo muy claro: en una ocasión, un viejo doctor en medicina general me consultó sobre la fuerte depresión que padecía. No podía sobreponerse a la pérdida de su esposa, que había muerto hacía dos años y a quien él había amado por encima de todas las cosas. ¿De qué forma podía ayudarle? ¿Qué decirle? Pues bien, me abstuve de decirle nada y en vez de ello le espeté la siguiente pregunta: "¿Qué hubiera sucedido, doctor, si usted hubiera muerto primero y su esposa le hubiera sobrevivido?" "¡Oh!", dijo, "¡para ella hubiera sido terrible, habría sufrido muchísimo!" A lo que le repliqué: "Lo ve, doctor, usted le ha ahorrado a ella todo ese sufrimiento; pero ahora tiene que pagar por ello sobreviviendo y llorando su muerte."
No dijo nada, pero me tomó la mano y, quedamente, abandonó mi despacho. El sufrimiento deja de ser en cierto modo sufrimiento en el momento en que encuentra un sentido, como puede serlo el sacrificio.
Claro está que en este caso no hubo terapia en el verdadero sentido de la palabra, puesto que, para empezar, su sufrimiento no era una enfermedad y, además, yo no podía dar vida a su esposa. Pero en aquel preciso momento sí acerté a modificar su actitud hacia ese destino inalterable en cuanto a partir de ese momento al menos podía encontrar un sentido a su sufrimiento.

(Textos tomados del libro El hombre en busca de sentido)

A continuación, un comentario de la Prof. Graciela Barroso

El sentido de la existencia sufriente
Comentarios sobre El hombre en busca de sentido, de Viktor Frankl (1946)
Prof. Graciela Barroso
5 de agosto de 2002

Cómo aceptar que la vida sea digna de ser vivida, a pesar de todo lo adverso que hay en ella, es el tema central del existencialismo. Víktor Frankl afirma que vivir es aceptar con dignidad el desafío que plantea la vida, con su carga de adversidad, y sobrevivir es hallar el sentido de ese sufrimiento.

¿Qué es el hombre, entonces? El ser humano es alguien inevitablemente afectado por su entorno. Sin embargo, el hombre tiene una cierta capacidad de elección, ya que puede conservar un vestigio de libertad espiritual, de independencia mental, incluso cuando se encuentra en circunstancias terribles de tensión psíquica y física. Al hombre se le puede arrebatar todo, salvo una cosa: la última de las libertades humanas, la elección de la actitud personal ante un conjunto de circunstancias para decidir su propio camino.

Aun cuando parezca que las circunstancias son más fuertes, siempre hay ocasiones para elegir si uno va a ser o no juguete de dichas circunstancias, renunciando a la libertad y a la dignidad. Es esta libertad espiritual, que no se nos puede arrebatar lo que hace que la vida tenga sentido y propósito.

El modo en que un hombre acepta su destino y todo el sufrimiento que éste conlleva, la forma en que carga su cruz, le da muchas oportunidades —incluso bajo las peores de las adversidades— para dar a su vida un sentido más profundo. Puede conservar su valor, su dignidad, su generosidad.O bien, en la dura lucha por la supervivencia, puede olvidar su dignidad humana y ser poco más que un animal. Una situación difícil puede proporcionarle la oportunidad de hacer méritos en el camino de la superación.

En todas partes, el hombre se enfrenta a su destino y puede conseguir algo por vía del sufrimiento. Muchas veces es precisamente una situación externa excepcionalmente difícil lo que da al hombre la posibilidad de crecer espiritualmente más allá de sí mismo. La realidad cotidiana representa una oportunidad y un desafío: o bien se puede convertir la experiencia en victoria, la vida en un triunfo interno, o bien se puede ignorar el desafío y limitarse a vegetar.

¿Qué es, en definitiva, vivir? Vivir significa asumir la responsabilidad de encontrar la respuesta correcta a los problemas que se nos platean y cumplir las tareas que la vida nos asigna continuamente. "Vida" no significa algo vado, sino algo muy real y concreto, que configura el destino de cada hombre, distinto y único.

La búsqueda por parte del hombre del sentido de la vida constituye una fuerza primaria y no una racionalización secundaria de sus impulsos, de sus instintos. Sentido no es algo que nace de la propia existencia, sino algo que hace frente a la existencia. (es decir, una respuesta personal desde la profundidad espiritual de la libertad, donde nadie puede tocar y donde habita Dios)

El hombre es una criatura responsable y debe aprehender el sentido potencial de su vida. Lo que se le pide al hombre no es, como en el caso de otros filósofos existenciales, que soporte la insensatez del mundo, de la vida, sino más bien que asuma racionalmente su propia capacidad para aprehender toda la sensatez incondicional de esa vida.

Cada época tiene su propia neurosis colectiva, es cierto. El vacío existencial, neurosis masiva de este tiempo según Frankl, puede develarse como una forma privada y personal de nihilismo, que se traduce a veces en la aseveración de que todo se ha perdido o carece de significación. Es cierto también que cada ser humano es un ser finito, y su libertad está restringida. No se trata, entonces, de liberarse de las condiciones que imponen las circunstancias del mundo, se trata de tomar una postura ante esas condiciones. La libertad, en definitiva, es la capacidad de la existencia humana para elevarse por encima de esas condiciones y trascenderlas.

En definitiva, el ser humano no es una cosa más entre otras cosas: las cosas se determinan unas a otras, pero el hombre, en última instancia, es su propio determinante. Lo que llegue a ser, dentro de los límites de sus facultades y de su entorno, lo tiene que hacer por y para sí mismo. ¿Qué es el hombre, para Frankl? Es el ser que siempre decide lo que es, en medio y a pesar de, las circunstancias. Y lo aclara con una imagen de su propia experiencia: el hombre es el ser que ha inventado las cámaras de gas, pero asimismo es el ser que ha entrado en ellas con paso firme, musitando una oración.

jueves, 25 de marzo de 2010

Sobre el Testimonio de Nancy

En el testimonio de Nancy podemos reconocer una vez más la Presencia amorosa de Dios que no quiere el sufrimiento de sus hijos, y los quiere en su Corazón, bajo su gracia. Lo que el Señor hizo con ella, también lo quiere hacer con todos. Quiero destacar algunos elementos muy importantes que nos sirven como indicación y predisponen el camino integral de sanación y liberación:

- Nancy nos presenta la pavorosa realidad -sufrida en carne propia- de la acción del maligno a través de sus operadores, aprovechándose de las heridas y los muchos sufrimientos.

- También se destaca cómo ella comenzó un camino de búsqueda en medio de su dolor y perseveró hasta encontrar la salida. Es un proceso, un verdadero camino de fe, no sólo de sanación. Luego reconoce que fue el Señor quien quiso ir a buscar a sus hijas. Nuestro Dios toma la iniciativa aún antes que nosotros nos demos cuenta.

- En ese camino recurrió al Templo, la casa de Dios, y luego buscó a un sacerdote, reconociéndose pecadora. Y Dios obró a través de los sacerdotes, ya sea en la misa, la confesión, la bendición de su casa…

- Es necesario no sólo el perdón de los pecados, sino la sanación de las heridas y un camino de liberación para tener la Paz que viene del Señor. Esto a través de la perseverancia y confianza en el Amor de Dios.

- Hubo momentos fuertes, emotivos, pero también una gran humildad y obediencia, iniciando un camino de oración personal cada vez más profunda y también prescindiendo de un sacerdote en especial, integrándose cada vez más plenamente a la Iglesia.

- En la misma comunidad o grupo de oración, o movimiento, etc. hay hermanos que son servidores del Señor, dispuestos a colaborar en este proceso… y también hay hermanos que aún no han comprendido la Misericordia y, aunque estén comprometidos, son muchas veces un obstáculo para la obra de Dios. No nos asustemos por eso, bendigamos a todos, perseverando en la oración, en los sacramentos y pidiéndole luz al Señor, él nos da el don del discernimiento y también de la misericordia para con todos.

- Todos somos pecadores, todos, no hay un solo justo (Rom 3,10). Y el único Señor y Salvador es Jesús, que ha venido para que todos tengamos Vida, y vida en abundancia, que ha venido a buscar y salvar lo que estaba perdido. Entonces jamás debemos dejar de ser misericordiosos con todos, para que así Dios tenga misericordia con nosotros, ya que todos la necesitamos.

De verdad, Nancy, muchas gracias por tu testimonio. El Señor no completó su obra en ti, seguramente Él te hará instrumento de bendición para los demás, en la línea de tu propio sufrimiento. Que Él te llene de su amor y realice plenamente en vos su obra salvadora también para los demás. Me confío a tus oraciones, ya que necesito, creo firmemente, más que nadie, de la Misericordia del Señor, y en Él confío. Bendiciones.

P. Luis

Anunciación del Señor

Evangelio de Lucas 1,26-38

El Ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen que estaba comprometida con un hombre perteneciente a la familia de David, llamado José. El nombre de la virgen era María. El Ángel entró en su casa y la saludó diciendo:
"¡Alégrate, llena de Gracia, el Señor está contigo!"
Al oir estas palabras, ella quedó desconcertada y se preguntaba qué podía significar ese saludo. Pero el Ángel le dijo:
"No temas, María, porque Dios te ha favorecido. Concebirás y darás a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús; él será grande y se lo llamará Hijo del Altísimo. El Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre y su reino no tendrá fin."
María dijo al Ángel: "¿Cómo puede ser esto, si yo no convivo con ningún hombre?" El Ángel le responió: "El Espíritu Santo descenderá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Por eso el niño será santo y se lo llamará Hijo de Dios. También tu parienta Isabel concibió un hijo a pesar de su vejez y la que era considerada estéril ya se encuentra en su sexto mes, porque no hay nada imposible para Dios". María dijo entonces: "Yo soy la servidora del Señor; que se cumpla en mí lo que has dicho". Y el Ángel se alejó.



De la Carta a los Hebreos 10, 4-10

Hermanos: es imposible que la sangre de toros y chivos quite los pecados. Por eso Cristo, al entrar en el mundo, dijo:
"Tú no has querido sacrificios ni oblación; en cambio, me has dado un cuerpo. No has mirado con agrado los holocaustos ni los sacrificios expiatorios. Entonces dije: 'Aquí estoy, yo vengo -como está escrito de mí en el libro de la Ley- para hacer, Dios, tu voluntad'".
Él comienza diciendo "Tú no has querido ni has mirado cn agrado los sacrificios, los holocaustos, ni los sacrificios expiatorios, a pesar de que están prescritos por la Ley". Y luego añade: "Aquí estoy, yo vengo para hacer tu voluntad". Así declara abolido el primer régimen para establecer el segundo. Y en virtud de esta voluntad quedamos santificados por la oblación del cuerpo de Jesucristo, hecha de una vez para siempre.

Tanto María como el Hijo Eterno al hacerce hombre, coinciden en una actitud fundamental: "AQUÍ ESTOY, PARA HACER TU VOLUNTAD"; "QUE SE HAGA EN MÍ SEGÚN TU PALABRA".
Es la principal actitud de fe, es la base de toda relación con el Señor: que su Voluntad se haga en nosotros "así en la tierra como en el Cielo". Y nada, ni nadie puede reemplazar esta disposición del Corazón de Jesús encarnada en María. Ningún sacrificio, holocausto ni oblación ni ofrenda puede reemplazar al Amor Oblativo de Cristo, causa de nuestra justificación, aceptada en el corazón, en la fe, en el seno de María.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Testimonio de Nancy

A continuación, el testimonio de Nancy. Los nombres de algunas personas han sido abreviados, para reservar la identidad, por respeto personal. ¡muchas gracias Nancy, porque de esta manera damos gracias al Señor que nos ama! A Él sea toda la gloria.


HOLA PADRE LUIS. QUE BENDICION PODER COMUNICARME CON USTED AUNQUE SEA EN ORACION. PADRE LUIS USTED FUE QUIEN LO UTILIZO DIOS PARA QUE YO ME SANARA. Y EL DIA QUE ME DESPEDI DE USTED ME TOMO TRISTEZA PERO DIJE- NO DEBO SER EGOISTA OTROS HERMANOS COMO YO TAMBIEN NECESITAN DE EL. Y LE DIJE USTED ME AYUDO Y ME SANO YO QUIER DAR TESTIMONIO.

YO FUI UNA OVEJA DESCARRIADA, CUANDO NACI, MIS PADRES EN ESA EPOCA ERAN DE CONDICION HUMILDE CON POQUITO CASI NADA DE CONOCIMIENTO DE LA VIDA EN CRISTO, (no los culpo al contrario eso me hizo crecer y darles gracias, por lo que soy hoy) A MI ME RECIBIO UNA “CURANDERA DE LA ZONA DEL CAMPO” FUI CRECIENDO Y CADA VEZ QUE NOS ENFERMABAMOS NO IBAMOS AL DOCTOR SINO A ESE TIPO DE PERSONA, CUANDO MAS GRANDE FUIMOS AL PUEBLO DE SANTA SYLVINA CHACO, ALLI ESTUDIE PARA DOCENTE Y SIEMPRE SEGUI CADA VEZ QUE TENIAMOS UN PROBLEMA A LA FAMOSA “ADIVINACION”

ASI PASARON LOS AÑOS ME CASE, Y ME DIVORSIE, TENGO DOS HIJAS, LA MAS GRANDE ESTUDIA MEDICINA Y LA OTRA SE CASO (para la gloria de Dios las dos confesaron y se sanaron espiritualmente a través de su palabra, enseñanza y oración),YA EN RESITENCIA, CONOCI AL PAPA DE MI HIJO QUIEN FALLECIO EN UN MOTEL CON OTRA SEÑORA.

PASARON LOS AÑOS Y YO SEGUIA ASISTIENDO A ESOS LUGARES, DE PRONTO EMPEZARON LAS PESADILLAS, FUE IMPRESIONANTE COMO DIOS ME QUERIA SALVAR, YO SENTIA MORIR Y ME PASABAN COSAS MUY FEAS EN MI CABEZA, ME FALTABA ENERGIA PARECIA Y VEIA COSAS QUE JAMAS HABIA VISTO, A LA NOCHE NOS ACOSTABAMOS CON MIS HIJOS Y NOS TIRABAN DE LOS CABELLOS, YO SENTIA OLOR A PELO QUEMADO, SALIA A LA CALLE Y ME SILVABAN,

ASI PASABAN MIS DIAS, SENTIA MUCHAS GANAS DE IR A LA IGLESIA Y EL DIA 16 DE SEPTIEMBRE DE 06/07 (no recuerdo bien) CAMINABA DESESPERADA POR LA ORILLA DE LA PARROQUIA ASUNCION,

FUI A LA MISA DE LA CATEDRAL Y COMULGUE SIN CONFESARME Y LE DIJE AL PADRE R. CUANDO LLEGUE ALLI “SOY PECADORA” NO PODIA LLEGAR HASTA ALLI, ERA UNA COSA MUY FEA, MUCHAS GANAS DE VOMITAR, SALI Y QUERIA IR A OTRA PARROQUIA Y NO VOLVER A MI CASA.

YO NO TENIA PAZ, Y NO SE DE DONDE (HOY SI SE, DE DIOS) SURGIO UNA LUZ, Y FUI MUY ENOJADA A ESA PERSONA (QUE NO VIENE DE DIOS) Y LE DIJE QUE NOS DEVUELVA A TODA MI FAMILIA LO QUE NOS QUITO. QUE SINO LA DENUNCIARIA EN LA IGLESIA, EN ESE MOMENTO TODOS SE DORMIAN MIS HIJOS, MENOS YO, MUY FUERTE Y CONSTANTE PEDIDO QUE NOS DEJE DE MOLESTAR, QUE YO SABIA QUIENES ERAN. DIOS ME MOSTRO TODO Y CADA UNA DE LAS COSAS QUE FUERON MALAS Y DE DONDE SALIAN. FUE UNA COSA MUY, PERO MUY FUERTE. YO ME DECIA ESTARE QUEDANDOME LOCA, PERO NO. ERA DIOS, QUE ME MOSTRO TODOS MIS PECADOS, NUNCA ANTES ME PUDE DAR CUENTA. YO ME DOY CUENTA QUE ERA UN ROBOT.

. YO HOY ME DI CUENTA QUE DIOS ME QUERIA SANAR, QUE GRANDE ES DIOS, CUANTO NOS AMA.

YO NO TENGO FAMILIARES AQUÍ EN RESISTENCIA, LLAME A MI HERMANA Y A MI MADRE, NADIE PODIA VENIR, YA PARA ESTO SE REBELO LA HIJA DEL MEDIO, EL NENE HACIA COSAS FEAS COMO ANIMAL, FUI A LA PARROQUIA SAN JAVIER Y HABLE CON UN SACERDOTE Y LE CONTE TODO, TOMO LOS DATOS Y ME HIZO ORAR, NO RECUERDO. PERO SIEMPRE BUSCANDO A DIOS MUY ARREPENTIDA.

SALI UN POCO TRANQUILA.

SIEMPRE BUSCABA A DIOS, REZABA COMO SABIA, PERO LE TENIA RECELO A LA VIRGEN MARIA.

PERO NO TODO TERMINA ALLI, EN MI CASA NO PODIA ESTAR HASTA QUE LLAME A LA CATEDRAL Y PEDI QUE VENGA UN SACERDOTE, VINO EL PADRE B., ME ESCUCHO, ME DIJO QUE NO PRENDA LA TELE Y NO RECIA A NADIE, POR QUE YO RECIBIA COMO MENSAJES SUBLIMINALES CUANDO PRENDIA LA RADIO O LA TELE, HIZO LA BENDICION, DIOS OTRA VEZ OBRO, VENCIDO ESTO. EMPECE A IR A MISA TODOS LOS DIAS, A LA PARROQUIA ASUNCION, Y NOS ABRAZABAMOS CON MIS HIJOS FRENTE AL SANTISIMO, LLORABAMOS MUCHO, HUBO DIAS QUE MI HIJO MAS CHICO QUE TENIA 6 AÑOS SE ESCONDIA DEBAJO DEL BANCO Y NO ME QUERIA MIRAR. YO RECIBIA UNA LUZ MUY FUERTE Y LLORABA.

PASO ASI VARIOS MESES Y UN DIA RECIBO UN SUPLEMENTO EN LA REVISTA CRISTO VIVE, DE SANTA TERESITA, Y MAS AUN UNA COMPAÑERA DE TRABAJO ME COMENTA ESTAMOS ORGANIZANDO LA FIESTA DE SANTA TERESITA Y HAY UN SACERDOTE NUEVO, SE LLAMA L.

YO TUVE UNA CRISIS, ME DEPRIMI, ME DIERON LICENCIA Y EMPEZE A IR A LAS MISAS A LA VIRGEN DE LA SONRISA, NO ME PERDIA MISAS EN LA PARROQUIA SANTA TERESITA, LLORABA MUCHO Y UN DIA EN UN MOMENTO DE ORACION CON EL SANTISIMO, EL PADRE L. ME DIJO-

-DIOS TE AMA- LLORE MAS AUN, SENTIA QUE DIOS ME ESTABA PERDONANDO MIS PECADOS Y TODOS LAS LECTURAS ERAN PARA MI, LAS HOMILIAS ERAN PARA MI, DIOS ME DECIA LAS COSAS, YO LO ENTENDIA ASI, APRENDI A ORAR GRACIAS AL PADRE L. B., PASO EL TIEMPO , ESTABAMOS HACIENDO LA NOVENA A LA DIVINA MISERICORDIA Y SE ACERCO LA HERMANA E., Y ME DICE VENI AL GRUPO DE ORACION LOS LUNES, EMPECE EN EL GRUPO DE ORACION FUERZA DE DIOS.

YO QUEDE SENCIBLE CUANDO ATACABAN O HABLABAN DE ALGUIEN ME DOLIA, ME PARECIA IMPOSIBLE. CONSIDERABA QUE TODAS LAS PERSONAS QUE ESTAN EN LA PARROQUIA ERAN MUY BUENAS, YO APRENDI A AMAR A DIOS Y QUERIA QUE TODOS AMEN ASI.

PASO EL TIEMPO, YA SE HABIA IDO EL PADRE L., QUE ME ENCAMINO, ME HIZO ENCONTRAR VERDADERAMENTE A DIOS, CONOCI COMO OBRA EL ESPIRITU SANTO.

FUI A ITATI CONFESE Y NO CONFORME CONFESE CON EL PADRE R. ASI DIOS ME FUE LLEVANDO. HICE EL SEMINARIO DE VIDA. ES UNA COSA MUY HERMOSA ENCONTRARME CON DIOS.

ENTRE ESTO PASARON MUCHAS IDAS Y VUELTAS EN EL GRUPO DE ORACION, COMO DIJE ANTES PENSABA QUE PORQUE LAS VEIA EN JESUS MISERICORDIOSO SIRVIENDO ERAN BUENAS DE CORAZON VERDADERO Y YO ERA LA EQUIVOCADA, HASTA LLEGRARON A DECIRME QUE LOS QUE ORABAMOS PARA EL PADRE L O LO VISITABAN ERA PECADORES, LLORE, PEDI A DIOS EN MIS ORACIONES, HABLE CON LA HERMANA E. Y ME DIJO SIMPLEMENTE -ORA HERMANA POR ESA PERSONA Y PEDILE A DIOS QUE TE MUESTRE LA VERDAD- ASI HICE. DIOS ME MOSTRO Y HOY SOY LA SERVIDORA DEL SEÑOR. DIOS ES AMOR. Y HABITA EN TODOS LOS CORAZONES, DEBEMOS ABRISRLE NUETRO CORAZON Y VIVR CON EL, EN EL, Y PARA EL ,SIEMPRE EN EL PRIMER ORDEN DE NUESTRAS VIDAS, SER SINCEROS Y NO DEJAR DOMINAR NUESTROS IMPULSOS POR LA MENTE.

HOY DOY MIL GRACIAS A DIOS, AL ESPIRITU SANTO, A MAMA MARIA, AL PADRE L QUE ME ENSEÑO A ORAR PARA ENCONTRAR PAZ Y CONOCER A DIOS. A TODOS LOS SACERDOTES, A LOS HERMANOS QUE ORARON SIN SABER POR MI, A LAS SERVIDORAS ELY Y ALICIA.

GRACIAS A MIS PADRES, PORQUE ME DIERON LA VIDA. A MIS HIJOS QUE LLEVABAN EL PECADO DE SU MADRE Y LES PIDO PERDON.

AL PADRE L. LE PIDO QUE SIGA ASI, QUE SIN SABER ME AYUDO Y MUCHO, DIRIAMOS QUE FUE EL INSTRUMENTO QUE UTILIZO MI SEÑOR PARA SANARME.

HOY NO FALTO A MISA SIENTO NECESIDAD DE ESTAR CON DIOS, A PESAR QUE VIVO PERMANENTEMENTE CON EL, TODO LO HAGO SEGÚN LA VOLUNTAD DE DIOS, MIS HIJOS SON MI ORGULLO. MI HIJA MAYOR , GLENDA, LA QUE ESTUDIA MEDICINA SE CONFIRMOY ES CATEQUISTA EN SANTO TOME. LA QUE SIGUE SE CASO Y TOMO LA COMUNION Y CONFIRMACION Y EL MAS PEQUEÑO YA TIENE 10 AÑOS ESTA EN SEGUNDO AÑO DE CATEQUESIS, Y HACE UNA ORACIONES DE LINDAS, ES UNA BELLEZA ESCUCHARLO ORAR, RECUERDA MUCHO LAS ENSEÑANZAS DEL PADRE L.

SOMOS UNA FAMILIA BENDECIDA POR DIOS.

DIOS VIVE Y NOS AMA. Y NOS DA AMOR EN ABUNDANCIA DEBEMOS VER SUS OBRAS.

GLORIA A DIOS!!!!!!

DIOS LO BENDIGA SIEMPRE.

p/d HERMANO O HERMANA NO TENGAS VERGÜENZA, ES UNA OBRA DE DIOS, DEBEMOS SENTIRNO ORGULLOSOS DE SER ELEGIDOS DE DIOS, POR QUE NOS RESCATO DEL PECADO Y ESTO SI QUE FUE UNA OBRA EN COMUNION CON DIOS EN TODOS LOS MIOS.

A. ME FALTO CONTAR QUE MI MAMA PERDIO A SU ESPOSO Y A SU HIJO MAYOR PERO SE AFERRO A DIOS TAMBIEN Y TOMO LA COMUNION Y CONFIRMACION A LOS 65 AÑOS. O SEA PARA DIOS NO HAY TIEMPO NI EDAD.