viernes, 28 de octubre de 2011

Santos Simón y Judas, Apóstoles

28 de octubre

SANTOS SIMÓN Y JUDAS, apóstoles. (FIESTA)

El nombre de Simón figura en undécimo lugar en la lista de los apóstoles. Lo único que sabemos de él es que nació en Caná y que se le daba el apodo de «Zelotes». Judas, por sobrenombre Tadeo, es aquel apóstol que en la última cena preguntó al Señor por qué se manifestaba a sus discípulos y no al mundo (Jn 14, 22).

Del comentario de san Cirilo de Alejandría, obispo, sobre el evangelio de san Juan
(Libro 12, 1: PG 74, 707-710)

COMO ME ENVIÓ MI PADRE, ASÍ OS ENVÍO YO

Nuestro Señor Jesucristo instituyó a aquellos que habían de ser guías y maestros de todo el mundo y administradores de sus divinos misterios, y les mandó que fueran como astros que iluminaran con su luz no sólo el país de los judíos, sino también a todos los países que hay bajo el sol, a todos los hombres que habitan la tierra entera. Es verdad lo que afirma la Escritura: Nadie se arroga este honor; sólo lo toma aquel que es llamado por Dios. Fue, en efecto, nuestro Señor Jesucristo el que llamó a sus discípulos a la gloria del apostolado, con preferencia a todos los demás.

Aquellos bienaventurados discípulos fueron columnas y fundamento de la verdad; de ellos afirma el Señor que los envía como el Padre lo ha enviado a él, con las cuales palabras, al mismo tiempo que muestra la dignidad del apostolado y la gloria incomparable de la potestad que les ha sido conferida, insinúa también, según parece, cuál ha de ser su estilo de obrar.

En efecto, si el Señor tenía la convicción de que había de enviar a sus discípulos como el Padre lo había enviado a él, era necesario que ellos, que habían de ser imitadores de uno y otro, supieran con qué finalidad el Padre había enviado al Hijo. Por esto, Cristo, exponiendo en diversas ocasiones las características de su propia misión, decía: No he venido a invitar a los justos a que se arrepientan, sino a los pecadores. Y también: He bajado del cielo, no para hacer mi voluntad, sino para cumplir la voluntad de aquel que me ha enviado. Dios no ha enviado su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él.

De este modo resume en pocas palabras la regla de conducta de los apóstoles, ya que, al afirmar que los envía como el Padre lo ha enviado a él, les da a entender que su misión consiste en invitar a los pecadores a que se arrepientan y curar a los enfermos de cuerpo y de alma, y que en el ejercicio de su ministerio no han de buscar su voluntad, sino la de aquel que los ha enviado, y que han de salvar al mundo con la doctrina que de él han recibido. Leyendo los Hechos de los apóstoles o los escritos de san Pablo, nos damos cuenta fácilmente del empeño que pusieron los apóstoles en obrar según estas consignas recibidas.

sábado, 22 de octubre de 2011

El amor por encima de todo

EVANGELIO DEL DOMINGO 23 DE OCTUBRE DE 2011

Lectura del santo evangelio según san Mateo 22,34-40

En aquel tiempo, los fariseos, al oír que Jesús había hecho callar a los saduceos, formaron grupo, y uno de ellos, que era experto en la Ley, le preguntó para ponerlo a prueba: «Maestro, ¿cuál es el mandamiento principal de la Ley?»

Él le dijo: «”Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todo tu ser.” Este mandamiento es el principal y primero. El segundo es semejante a él: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo.” Estos dos mandamientos sostienen la Ley entera y los profetas.»

Palabra del Señor

Evangelio Comentado por:
José Antonio Pagola
Mateo (22,34-40
)

CUIDAR LO ESENCIAL DE LA FE CRISTIANA

En cierta ocasión los fariseos se reunieron en grupo y le hicieron a Jesús una pregunta que era motivo de discusión y debate entre los sectores más preocupados de cumplir escrupulosamente los seiscientos trece preceptos más importantes sobre el sábado, la pureza ritual, los diezmos y otras cuestiones: «Maestro, ¿cuál es el mandamiento principal de la Ley?».

La respuesta de Jesús es muy conocida entre los cristianos: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todo tu ser». Este es el más importante. Luego añadió: «El segundo es semejante a éste: amarás a tu prójimo como a ti mismo». Y concluyó con esta afirmación: «Estos dos mandamientos sostienen la Ley y los profetas».

Nos interesa mucho escuchar bien las palabras de Jesús pues también en la Iglesia, como en el antiguo Israel, ha ido creciendo a lo largo de los siglos el número de preceptos, normas y prohibiciones para regular los diversos aspectos de la vida cristiana. ¿Qué es lo primero y más importante? ¿Qué es lo esencial para vivir como seguidores de Jesús?

Jesús deja claro que no todo es igualmente importante. Es un error dar mucha importancia a cuestiones secundarias de carácter litúrgico o disciplinar descuidando lo esencial. No hemos de olvidar nunca que sólo el amor sincero a Dios y al prójimo es el criterio principal y primero de nuestro seguimiento a Jesús.

Según él, ese amor es la actitud de fondo, la fuerza clave e insustituible que pone verdad y sentido a nuestra relación religiosa con Dios y a nuestro comportamiento con las personas. ¿Qué es la religión cristiana sin amor? ¿A qué queda reducida nuestra vida en el interior de la Iglesia y en medio de la sociedad sin amor?

El amor libera nuestro corazón del riesgo de vivir empobrecidos, empequeñecidos o paralizados por la atención insana a toda clase de normas y ritos. ¿Qué es la vida de un practicante sin amor vivo a Dios? ¿Qué verdad hay en nuestra vida cristiana sin amor práctico al prójimo necesitado?

El amor se opone a dos actitudes bastantes difundidas. En primer lugar, la indiferencia entendida como insensibilidad, rigidez de mente, falta de corazón. En segundo lugar, el egocentrismo y desinterés por los demás.

En estos tiempos tan críticos nada hay más importante que cuidar humildemente lo esencial: el amor sincero a Dios alimentado en celebraciones sentidas y vividas desde dentro; el amor al prójimo fortaleciendo el trato amistoso entre los creyentes e impulsando el compromiso con los necesitados. Contamos con el aliento de Jesús.

CHAVEZ REGALA A KADAFI ESPADA DE BOLÍVAR SWORD SEP. 2009 معمر القذافي G...



Qué casualidad que Irak, Libia, Venezuela, todos con riquezas petroleras, sean blancos de USA...
pero... ¿qué hacen los "reyes" que gobiernan esos pueblos con los petrodólares? Los más ricos en petróleo... tienen extrema pobreza en su población... y se aferran al poder con ansias de eternidad...